SeeSense sumerge a la cámara Toshiba IK-HD1 a más de 4.000 metros

En la preparación de un proyecto de investigación científica, la británica SeeSense ha sumergido ha probado con éxito una Toshiba IK-HD1 a una profundidad de 4.300 metros (14.000 pies) y a una presión de más de 400 bares.

En la preparación de un proyecto de investigación científica, la británica SeeSense ha sumergido ha probado con éxito una Toshiba IK-HD1 a una profundidad de 4.300 metros (14.000 pies).

La prueba se llevó a cabo en el Océano Atlántico, frente a las Islas Canarias, con un equipo a bordo de un buque de investigación especialmente equipado en Lisboa. Se trataba de pruebas de diferentes tipos de sistemas de iluminación para trabajar en conjunto con la cámara de Toshiba.

Todos los componentes se han instalado en una carcasa de titanio que constaba de un bloque de vídrio de 25 mm de espesor ópticamente plano para hacer frente a presiones de 421 bar (6114 psi).

Todo el montaje completo, incluyendo el sistema de iluminación llegó a descender a profundidades de cerca de 4.300 metros.

En las imágenes en alta definición captadas por la cámara a esas profundidades se puede observar una pesa de acero inoxidable con la que unida a un hilo al barco ha servido para medir la distancia al fondo. El peso se ve saltando a lo largo del fondo del mar conforme el barco se movía al son de las olas en la superficie.

Nigel Paine, fundador de SeeSense, ha comentado que «las imágenes producidas demuestran la calidad que ofrece la Toshiba IK-HD1 con una sensibilidad de 3-CCD a pesar de su tamaño. Además, estábamos impresionados por la excelente calidad de imagen incluso cuando metida dentro de la caja especial diseñada para hacer frente a estas profundidades extremas».

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