Albert Espelt consigue el Goya a Mejor Dirección de producción por la odisea de ‘Mediterráneo’

Un rodaje internacional y los siempre desafiantes retos que ofrece rodar en entornos acuáticos permitieron a Albert Espelt y Kostas Sfakianakis llevarse el Goya a Mejor Dirección de Producción por Mediterráneo。

Rodada durante ocho semanas en localizaciones de Barcelona y Grecia, Mediterráneo presenta con crudeza el drama de los refugiados. La producción fue una auténtica odisea: aúno contenido digital con localizaciones reales, lo que supuso que Espelt y su equipo se enfrentaran a importantes complicaciones durante el rodaje. Por ejemplo, una serie de ataques neonazis en Lesbos obligaron a replantear las localizaciones “para que estas fueran identificables con las reales”, tal y como el propio Barrena recordó en una entrevista con El Periódico.

Espel recogió el galardón agradeciendo el reconocimiento a los académicos y compartiéndolo con el resto de compañeros de nominación, quienes “también se lo merecen”. Visiblemente emocionado, Espelt ha dado las gracias a las productoras Lastor Media, Arcadia y Fasten Films, y al propio director Marcel Barrena, por haber explicado “una historia sobre una problemática tan real que esperemos que esta película ayude a que se pongan medios y el Mediterráneo deje de ser una gran fosa común”.

Más allá de sus compañeras de producción, Espel ha querido dedicar este premio a los socorristas, protagonistas de la producción: “Recuerdo la primera reunión donde dijeron una frase que se me quedó: la gente cuando ve un socorrista en la playa, lo que piensa es: un chavalín sacándose unas perras en verano. Y no es así, lo nuestro es una profesión que solo nos la reconoce la gente a la que salvamos la vida y sus familiares. Yo, desde aquí, quiero reconocer esta profesión y quiero dedicarle este Goya a toda esa gente que salva vidas en nuestras playas y, más aún, fuera de ellas”.

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